La vida es algo que te sucede sin darte cuenta, y que lo único que puedes hacer es disfrutar cada momento.
Tu siempre intentas exprimir al máximo cada risa y cada alegría, cada momento que te hace sentir bien, por muy tonto que sea, siempre lo recuerdas, y te gusta vivir momentos así millones de veces. Pero, ojalá la vida fuese así siempre, pero por desgracia, no lo es.
La vida es muy perra, y parece que disfruta poniendote obtáculos y haciéndotelo todo mucho más difícil.
Te hace pasarlo mal, enamorarte, llorar, enfadarte, desesperarte, aburrirte, olvidarte, agoviarte.... y muchísima cosas más. Te hace enfrentarte a retos y a decisiones en los que no sabes ni siquiera como has llegado a estar metida en ellos, pero los afrontas. Te obliga a luchar por lo que quieres, la mayoría cosas imposibles, que no hay probabilidades de que consigas, pero, tu piensas que mientras haya una posibilidad, media posibilidad entre mil millones de que pase, vale la pena intentarlo, y aunque te des de bruces contra el muro, tu sigues y sigues intentándolo, como una tonta que no aprende de la lección.
En mi opinión, no te compliques y aprovecha tu vida, que es muy corta, no te estanques en los obtáculos que te ofrece, y sobre todo, disfrútala al máximo, porque, al fin y al cabo, no saldrás viva de ella.
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